«Miss you»

09/03/2023

Aquello que no quisiste decir cuando pudiste y más lo necesitaba, lo dijiste en el momento menos propicio. El momento de despedirnos. Fueron palabras afiladas con obsidiana. Un comentario sincero y directo que propició un corte perforante – una liberación de cortisol. Un silencio. Un llanto. Unas lágrimas enriquecidas con prolactina y adrenocorticotropina. Una explosión circunstancial que desencadenó una espaciada y lenta cicatrización aguda. Un caminar lento. Una reflexión introspectiva. Convertir ese echar de menos en hilo para coser con integridad las heridas rasgadas por la realidad. Unas heridas de color aguamarina, suaves al tacto y olor de perfumería. ¿Recibir voluntariamente o asumir resignadamente? Únicamente… aceptar.

Deja un comentario